Nunca es tarde para morir - Pablo Palazuelo

Conocí de Pablo Palazuelo a través de otros blogs. Desde las primeras reseñas que leí de su novela, me sentí atraída por ella. Cuando contactó conmigo para ofrecérmela no pude decir que no, a pesar de estar bastante saturada de lecturas pendientes. Por fin, después de casi dos meses os traigo mis impresiones de esta original novela.

Título: Nunca es tarde para morir
Autor: Pablo Palazuelo
Editorial: Amazon
Páginas: 606
Precio: 18,50 euros

Sinopsis

Las Trompetas de Jericó tronaron desde el cielo anunciando la inminente llegada de la muerte. 

Así arranca esta novela negra y de misterio, en la que cinco enigmáticos veteranos de sus respectivos servicios secretos conocen a una cautivadora adolescente, de mala vida y peor fortuna, que desatará una espiral de sorprendentes fatalidades y los arrastrará hacia un enemigo despiadado. 

Un libro que, aunque pueda parecerlo, no es una novela de espías, sino una trepidante obra perteneciente al género policiaco, cargada de intriga y crímenes. 

Pablo Palazuelo Basaldua nace en Madrid, en el año 1965. Estudia Ciencias Empresariales y habla varios idiomas. Actualmente está casado y tiene tres hijos.

Entre sus aficiones se encuentra la fotografía, la cual nace cuando sirve como voluntario en una Unidad de Operaciones Especiales del Ejército. Gracias a ella, logra realizar una fotografía que primero es publicada en una revista y posteriormente, aprovechando que guarda cierta relación con el argumento, le sirve como fondo de la portada de su primera novela, Nunca es tarde para morir, historia con la que comienza su aventura como escritor y novelista.

Mis impresiones

Tras dos episodios aislados, que sólo lograremos entender a medida que avanza la novela, la historia comienza con la presentación de cinco empresarios peculiares: tres de ellos (Louis, Travis y Johann) viajan desde diferentes puntos de Europa hasta Nueva York, otros dos (Harry y Nikolai) residen allí. 

Todos ellos tienen una serie de características en común: han pertenecido a los servicios secretos de sus respectivos países, tienen poco más de sesenta años y están a cargo de empresas solventes, sin grandes beneficios, pero que se dedican, de alguna manera, a dar una oportunidad a gente con potencial y sin demasiadas posibilidades de escalar profesionalmente.

El grupo se conoce desde hace muchos años y, anualmente, se reúnen en Nueva York y juegan al póker. De entre ellos, Louis, de origen francés, es un seductor nato. Parece que los años no han hecho demasiado mella en él porque sigue apuntando a objetivos muchos más jóvenes con bastante éxito.

En su primera jornada en la ciudad, mientras Louis disfruta de la noche neoyorquina, conoce a una enigmática joven con unos ojos verdes que lo arrastran detrás de ella en una curiosa excursión nocturna hacia una isla cercana. En algún momento

de la noche, la joven desaparece en circunstancias complicadas.

Al día siguiente, Louis, preocupado por lo sucedido, pedirá ayuda a sus amigos para dar con el paradero de la chica, iniciándose a partir de este momento una espiral de acontecimientos en los que siempre parece estar implicada de alguna manera, Kayden Fox, la enigmática joven. ¿Quién es realmente ella? ¿Por qué tiene tanto magnetismo?

Es en este punto donde aparece en escena la teniente Marian Bennett, de la policía de Nueva York, una joven de 35 años que se hará cargo, junto a Christian Willocks, de la investigación. 

No cabe duda de que Pablo Palazuelo conoce a la perfección la ciudad de Nueva York que es el escenario principal de la historia. Lo demuestra en su novela, llevándonos a mil y un rincones, desde los más emblemáticos hasta aquellos de los que nadie quiere conocer, donde no encontraremos más que escoria humana. 

Nunca es tarde para morir es una novela negra, muy negra, como bien dice su publicidad. Tiene una estructura muy original y que engancha desde sus primeros capítulos. Una historia muy bien construida y ambientada en la que, en ocasiones, me he sentido perdida por la complejidad de la trama y el exceso de información que nos proporciona. Un puzzle con muchas piezas. 

Quizá la única pega que le pondría a la historia es precisamente ese macropuzzle que nos presenta el autor. A pesar de resultar absolutamente adictiva, hubiera aligerado la novela, restando alguna información sobre el complejo pasado de cada uno de los protagonistas. Evidentemente, sobra decir que todos sus personajes están muy bien perfilados, en ocasiones en exceso. A pesar de esto, me ha resultado un poco difícil de entender a Kayden Fox, que muta de la inocencia a la frialdad en segundos.

En definitiva,  con las salvedades que he hecho, Nunca es tarde para morir me ha parecido una novela de lo más interesante llena de intriga, traición, rencor y muerte, que te pega a sus páginas y que nos adentra en una historia bastante original en la que nada es lo que parece.

Valoración: 7

Esta novela participa en el mes temático de la novela negra organizado por Laky de Libros que hay que leer