La amiga estupenda - Elena Ferrante

La amiga estupenda

Autor: Elena Ferrante

Editorial: Lumen

Páginas: 392 

Precio: 19,90 euros

Sinopsis

Con La amiga estupenda, Elena Ferrante inaugura una tetralogia deslumbrante que tiene como telón de fondo la ciudad de Nápoles a mediados del siglo pasado y como protagonistas a Lenù y Lila, dos jóvenes mujeres que están aprendiendo a gobernar su vida en un entorno donde la astucia, antes que la inteligencia, es el ingrediente de todas las salsas.

La relación a menudo tempestuosa entre Lila y Lenù viene acompañada de un coro de voces que dan cuerpo a su historia y nos muestran la realidad de un barrio pobre, habitado por gente humilde que acata sin rechistar la ley del más fuerte, pero La amiga estupenda está lejos del realismo social: lo que aquí tenemos son unos personajes de carne y hueso, que nos intrigan y nos deslumbran por la fuerza y la urgencia de sus emociones.

Por primera vez Ferrante aborda una narración muy amplia, poniendo en escena un verdadero tableau vivant donde no hay espacio para el tópico: todo es vida y todo respira al hilo de la mejor literatura.

«El reto para quien escribe es llenar la distancia entre lo que vives y lo que cuentas, sentir físicamente el impacto de la narración...»

Elena Ferrante

La autora

Nadie sabe quién es Elena Ferrante, y sus editores de origen procuran mantener un silencio absoluto sobre su identidad. Alguien ha llegado a sospechar que sea un hombre; otros dicen que nació en Nápoles para trasladarse luego a Grecia y finalmente a Turín.

La mayoría de críticos la saludan como la nueva Elsa Morante, una voz extraordinaria que ha dado un vuelco a la narrativa de los últimos años. El éxito de crítica y de público se refleja en artículos publicados por periódicos y revistas tan notables como The New York Times y Paris Review.

En 2010 Lumen publicó un volumen titulado Crónicas del desamor, donde se reunían las tres novelas para el público adulto publicadas por Ferrante a lo largo de los años, dos de las cuales fueron llevadas al cine. Luego vino esta saga compuesta por La amiga estupenda, Un mal nombre, Las deudas del cuerpo, y finalmente La niña perdida, un cuarto volumen que cierra una obra destinada a convertirse en un clásico de la literatura europea del siglo XXI.

«No me arrepiento de mi anonimato. Descubrir la personalidad de quien escribe a través de las historias que propone, de sus personajes, de los objetos y paisajes que describe, del tono de su escritura, no es ni más ni menos que un buen modo de leer.»

Elena Ferrante en una entrevista via mail de Paolo di Stefano para Il Corriere della Sera.

Mis impresiones

La amiga estupenda arranca cuando Lenù, una sexagenaria, recibe una llamada del hijo de su queridísima amiga Lila indicándole que su madre ha desaparecido de la casa. Lila se ha marchado,  ha recogido toda su ropa y no ha dejado ninguna pista sobre su paradero. Parece como si se la hubiera tragado la tierra. A partir de esa llamada Lenú recordará las palabras de su amiga, tiempo atrás, amenazando con borrarse del mapa y retrocederá en el tiempo para contarnos en primera persona como surgió esa amistad en un barrio marginal napolitano.

Esta novela da inicio a la tetralogía Dos amigas y nos narra una historia que, a pesar de lo cotidiano, atrapa al lector con su tono intimista,  unos personajes llenos de matices y ese maravilloso retrato que de un barrio tan gris y oscuro, donde se palpan la miseria, el hambre y las diferencias sociales .

La novela está dividida en dos grandes bloques y subdividida en capítulos numerados de corta extensión, que abarcan la infancia y adolescencia de Lila y Lenú; una historia que nos llegará a través de dos voces narrativas, en las que la autora da muestras de su buen hacer concediéndole la primera persona a Lenù, que necesita hacerse oír. Es más débil, más dependiente, más insegura y es a ella a quien otorga el privilegio de  poder expresar con sus propias palabras sus sentimientos, reservando la tercera persona para Lila. Es tal la fuerza que transmite esta última, que no necesita hablar con voz propia, pese a su desapego y su independencia, brilla con luz propia. Conoceremos como nació esa amistad de dos niñas que perdurará a través de los años.

La vida de Lila y Lenù  se remonta a los años cincuenta y podría ser la de cualquiera de nosotros si dejamos al margen el entorno. Es en definitiva la historia de una amistad que conoceremos  través de los ojos de una niña en un barrio marginal napolitano. Lenù es una chiquilla miedosa, de familia muy humilde que sólo en compañía de su amiga estupenda se encuentra segura, es  feliz, se siente  invencible, valiente. La envidia y la admira a partes iguales.

A lo largo de la lectura, conoceremos la evolución de dos niñas, cuyos caminos serán como un elástico que se estira y retrocede para unir y separar sus vidas; unas vidas que estarán marcadas por las dificultades de sus familias. Cada una de ellas necesitará de la otra y utilizarán su inteligencia para lograr escapar del entorno que les rodea.

Personalmente me han conquistado la parte relativa a su infancia por su inocencia, sus sueños y las dificultades familiares. Esas niñas crecerán y los sueños irán cambiando: Lila queriendo convertirse en diseñadora de zapatos y Lenù en escritora. Muchos nos hemos sentido identificados con alguna de estas dos pequeñas. Es fácil hacerlo, incluso entenderlas. ¿Quién no ha tenido una amiga estupenda de pequeña a la que idolatraba? ¿Quién no ha sentido envidia de alguien que para nosotros era lo más? ¡Qué lejos está el mar de nuestro barrio cuando tenemos que ir caminando y cuánto miedo da salir de nuestra manzana en la que nos sentimos tan seguras!

Otro de los puntos fuertes de la novela es la ambientación.  Ferrante nos dibuja el barrio de los sueños rotos donde la pobreza y la miseria acabaron con los anhelos de los más necesitados y fueron sustituidos por el agotamiento y el hastío. Encontraremos de todo, desde el que nada tiene hasta los más pudientes que viven a costa de los de abajo. Junto al crecimiento de las protagonistas, el despertar de sus cuerpos y su sexualidad asistiremos a la evolución de ese barrio, a la apertura de nuevos comercios, la llegada de las nuevas tecnologías a las casas y con ellas un ligero bienestar.

La cantidad de personajes que desfilan por sus páginas hizo que, en un principio, me costara un poco seguir la trama, sobre todo por la dificultad para retener nombres tan parecidos (Rino, Nino…). No obstante, salvado ese primer escollo, la historia me ha atrapado de tal forma que ha sido un no parar. Pese a ser una novela de ritmo pausado que invita a degustarla sin prisas, la autora tiene una prosa cuidada pero muy fluida, plagada de detalles con los que matizar a cada uno de los protagonistas.

En definitiva, no puedo sino recomendaros una novela que esconde mucho detrás de esa aparente sencilles y conquista por el trazado de sus personajes y el retrato de Nápoles en los años cincuenta.