Como fuego en el hielo - Luz Gabás

Como fuego en el hielo

Autor: Luz Gabás

Editorial: Planeta

Páginas: 576

Precio: 21 euros

Sinopsis

El fatídico día en el que Attua tuvo que ocupar el lugar de su padre supo que su prometedor futuro se había truncado. Ahora debía regentar las termas que habían sido el sustento de su familia, en una tierra fronteriza a la que él nunca hubiera elegido regresar. Junto al suyo, también se frustró el deseo de Cristela, quien anhelaba una vida a su lado y, además, alejarse de su insoportable rutina en un entorno hostil. Un nuevo revés del destino pondrá a prueba el irrefrenable amor entre ellos; y así, entre malentendidos y obligaciones, decisiones y obsesiones, traiciones y lealtades, Luz Gabás teje una bella historia de amor, honor y superación.

Los convulsos años de mediados del siglo xix, entre guerras carlistas y revoluciones; la construcción de un sueño en las indomables montañas que separan Francia y España; y una historia de amor que traspasa todas las barreras. Una novela escrita con el apasionante pulso narrativo de la autora de Palmeras en la nieve.

Luz Gabás Ariño nació en 1968 en Monzón (Huesca). Los mejores momentos de su niñez y adolescencia también transcurrieron entre el pueblo de su familia paterna (Cerler, en el Valle de Benasque) y el de su familia materna

(Serrate, en el Valle de Lierp). Después de vivir un año en San Luis Obispo (California), estudió en Zaragoza, donde se licenció en Filología Inglesa y obtuvo más tarde la plaza de profesora titular de escuela universitaria. Durante años ha

compaginado su docencia universitaria con la traducción, la publicación de artículos, la investigación en literatura

y lingüística y la participación en proyectos culturales, teatrales y de cine independiente.

Desde 2007 vive en el precioso pueblo de Anciles, junto a la Villa de Benasque, donde se dedica, entre otras cosas, a escribir.

Su primera novela, Palmeras en la nieve, fue uno de los éxitos editoriales de 2012.

Mis impresiones

Hay novelas que se quedan con nosotros para siempre, Palmeras en la nieve es una de las que dejó en mí esa huella que tanto ansiamos los lectores. Después vino Regreso a tu piel, una historia muy diferente, que no me llegó tanto, pero tan bien contada que me dejó claro que seguiría la trayectoria de Luz Gabás. Hoy os cuento mis impresiones de Como fuego en el hielo, su última novela.

Año 1843. Attua es un joven estudiante de ingeniería lleno de proyectos e ilusiones. Se encuentra cursando sus estudios en Madrid bajo la protección de su tío Ricardo, un militar muy cercano al recién exiliado Espartero, cuya carrera está atravesando un momento de gran incertidumbre por la inestabilidad política imperante. En la capital, comparte sus días con su íntimo amigo de la infancia, Matías. Un duelo inesperado y la posterior muerte del conde al que se enfrenta Matías harán que este último tenga que huir a Francia a fin de mantener su libertad. Attua tras acompañar a su amigo herido hasta la frontera con Francia, regresará a su pueblo natal, Albort (nombre elegido por la autora en la novela para referirse al valle de Benasque), para informar a la familia de Matías sobre los acontecimientos. Lo que no puede imaginar el joven es que su llegada a Albort y las noticias que le aguardan harán que su vida y sus sueños junto a Cristela queden truncados. 

La familia de Attua regenta desde hace años una casa de baños en las montañas, junto a Albort. El inesperado fallecimiento del padre de Attua los deja en una difícil situación económica por lo que el joven, en un acto de madurez y responsabilidad, decide renunciar a todos sus proyectos para sacar a los suyos adelante aun a costa de tener que dejar atrás al amor de su vida, Cristela. 

Leer a Luz Gabás es una siempre una delicia; su calidez, una prosa muy cuidada, descripciones minuciosas, esa capacidad para trasladarte a los escenarios y la fuerza que imprime a los personajes hacen que la novela te arrastre sin remedio. Una historia que corre a cargo de un narrador omnisciente, mantiendo un perfecto equilibrio entre diálogos y narración y en la que la tensión narrativa va creciendo por momentos. 

Como fuego en el hielo nos traslada hasta una localidad cercana a la frontera pirenaica en una época convulsa de la historia de España, mediados del siglo XIX, entre guerras carlistas y revoluciones. Conoceremos del nacimiento de los primeros balnearios a uno y otro lado de la frontera. Francia será la predecesora, España le seguirá; unos complejos que fueron creciendo a lo largo de los años y donde se daba cita lo más granado de la aristocracia europea. Nos remontamos hasta el año 1843 para ir avanzando con una cronología lineal durante unos veinticinco años en la historia de nuestros protagonistas. No solo asistiremos a una preciosa historia de amor sino que también seremos partícipes del difícil día a día en un lugar aislado en las montañas: cómo era la vida social en la época, los problemas de abastecimiento de la población o la forma de enfrentar las epidemias. Son muchos los escenarios que encontraremos en la novela: Madrid, ocupa apenas las primeras páginas para posteriormente trasladarnos a las frías montañas de Albort o a Luchón, Cauterets y Montréjau, al sur de Francia.

Deberías viajar a Luchon o Cauterets para hacerte una idea -le había dicho-. La gente adinerada de París frecuenta los establecimientos de baños de los Pirineos franceses. Ni todos desean subir a las montañas ni todos están enfermos. Y los que lo están no quieren que lo parezca. Quieren salones de sociedad y diversión. Ocupar el día y la noche. Juntarse con los amigos en un sitio especial para pasar las vacaciones. Los jóvenes aristócratas y burgueses encuentran el placer del viaje y de la estancia en los baños, sin más. Tardaremos más o menos, pero en España los imitaremos en esto como en tantas otras cosas.

Estamos ante una historia que mezcla varios géneros y en la que, pese a estar encuadrada dentro de la novela romántica de la que hay mucho en ella, no solo por la época en que está ambientada sino por la pasión que envuelve a sus personajes, también la historia tiene un peso importante: la del surgimiento de los balnearios y la situación socio política del país. En este sentido, me ha parecido muy original e interesante conocer de esas primeras termas, algo sobre lo que no había leído anteriormente y, de otro lado, acertada la forma en la que la autora ha introducido en la trama la inestabilidad política y social reinante en España, sin abrumar al lector, logrando una lectura fluida a la vez que logra mostrar un mapa claro de la situación. 

No podría haber mejor título para una historia, donde el fuego de la pasión que abrasa a Attua y Cristela contrasta con la frialdad de la nieve que cubre las montañas. Luz Gabás sabe dibujar escenarios como nadie. Si ya lo demostrara con Palmeras en la nieve, ahora nos traslada hasta el polo opuesto, esas frías montañas de los Pirineos donde el invierno no tiene clemencia. Ha sido un verdadero placer imaginar esos Montes malditos que separan España de Francia y dejarme llevar por la fuerza de esos personajes, que van creciendo a medida que nos adentramos entre sus páginas. Attua, es un hombre juicioso y trabajador que antepone el deber a sus propios deseos, pero que mantendrá una gran lucha interior por esa sed de amor hacia Cristela que ni la distancia puede acallar. Cristela es una auténtica luchadora, una niña que no tuvo una vida fácil y que se convertirá en una mujer que guarda en secreto un amor imposible de olvidar, pero que con la inteligencia y valentía necesaria para adaptarse a las circunstancias y superarse día a día. Dentro del elenco de los secundarios hay dos personajes que me han conquistado: Aurore, una mujer aventurera, decidida, afable, generosa y con una mente tan abierta para la época en la que se desenvuelve la novela y Shelton, un hombre que a pesar de sus circunstancias destaca por su sencillez y la sinceridad de sus sentimientos.

Como fuego en el hielo es la preciosa historia un amor inquebrantable que nació entre dos niños, pero también es una novela histórica sobre el nacimiento de los balnearios, con personajes muy vivos, en la que encontraremos envidias, secretos y sobre todo gente valiente que, pese a tener que lidiar contra muchas adversidades, se mantendrá íntegra ante la defensa de sus ideales.