Emma Cruz es abogada y profesora de derecho penal. Se traslada al pequeño pueblo gallego de Merlo para impartir clases en la universidad, sin saber que ese lugar está marcado por la desgracia.
Su llegada coincide con el veinticinco aniversario de la desaparición de las hermanas Giraud, a quien parece que se las haya tragado la tierra. Así, Emma descubrirá que los habitantes de Merlo guardan secretos inconfesables. ¿Qué fue de las hermanas Giraud? ¿Están muertas? Y si es así, ¿quién fue el responsable
y por qué nunca encontraron sus cuerpos?
Infamia es un thriller psicológico donde nada es lo que parece. Una novela de un ritmo vibrante que agarra el lector y lo conduce a los límites de la condición humana. Una historia de amor, de odio y de locura.
MIS IMPRESIONES
Nada sabía yo de Ledicia Costas hasta que la portada de esta novela se clavó en mi retina como una de las novedades más llamativas de la temporada. A esa imagen tan impactante se le sumó una sinopsis más que tentadora. Y los primeros comentarios de algunos blogueros hicieron el resto. Hoy os hablo de Infamia.
Emma Cruz es una abogada de mediana edad a la que conocemos
rumbo al que será su destino laboral durante los próximos meses. Ha obtenido
una plaza como profesora de Derecho Penal en la universidad, y durante ese tiempo
se alojará en Merlo, un pequeño pueblo gallego que quizá pueda proporcionarle
la estabilidad emocional que necesita en esos momentos.
La lluvia y la oscuridad, que serán una constante en esta
novela, traerán a la memoria de Emma un trágico suceso del pasado que cambio su
vida para siempre. Casualmente, a su llegada a Merlo conocerá que, también en
aquella localidad, hace veinticinco años, la desaparición de las hermanas Giraud
marcaría para siempre la apacible vida de sus habitantes. Fue uno de esos casos
que nunca se llegó a resolver, algo que todos intuyen lóbrego y escalofriante; un
tema tabú, entre otros tantos cuyo secreto guardan los habitantes de esa
pequeña localidad.
Ledicia Costas nos ofrece en Infamia un thriller psicológico,
narrado con una prosa tan impecable como su ambientación que, si bien atrapa
desde las primeras páginas por esas largas sombras que se intuyen tras la
mayoría de los personajes, va ganando enteros a medida que avanzamos, tensando y
retorciendo la cuerda hasta límites insospechados. La oscuridad y frialdad del alma
humana se funden con un escenario tan real que sientes la humedad calarte hasta
los huesos.
Heridas de corazón, el miedo y sus consecuencias, los
errores del pasado o la depravación serán algunos de los ingredientes de una trama
impactante y dolorosa que pone la piel de gallina y que se sirve de una galería
de personajes extraordinarios de los que poco se puede contar salvo que son de esos
que traspasan el papel y te hacen sentir todo un revoltijo de emociones: empatía,
dolor, ternura, lástima, asco, terror…
Un narrador omnisciente, alternando la narración en presente
y en pasado, será el encargado de conducirnos por esta trama adictiva en la que
Emma actúa como hilo conductor, y cuyas vivencias en el presente van abriendo
una serie de puertas al pasado que nos permitirán montar las piezas que nos faltan
de la vida de cada uno de sus protagonistas.
Infamia ha sido una lectura sorprendente, adictiva,
punzante, de esas que te golpean en lo más hondo de tu ser. Una novela con una
prosa cuidada, una tensión narrativa in crescendo y unos personajes
tan humanos que son el alma de la novela. Es esta una historia de vidas rotas:
unas desde el tallo, otras desde la raíz. No os la perdáis.