Dicen que los buenos perfumes se guardan en frascos pequeños y es precisamente lo que podríamos decir de esta obra, una joya literaria, que con sus escasas páginas me ha hecho pasar un rato muy agradable.
Datos técnicos
Título: El baile
Autor: Irene Némirovsky
Editorial: Salamandra
Páginas: 94
ISBN: 9788498380231
Precio: 11,00 euros
Sinopsis
Instalados en un lujoso piso de París, los Kampf poseen todo lo que el dinero puede comprar, excepto lo más difícil: el reconocimiento de la alta sociedad francesa. Así pues, con el propósito de obtener el codiciado premio, preparan un gran baile para doscientos invitados, un magno acontecimiento social que para el señor y la señora Kampf supondrá, respectivamente, una excelente inversión y la soñada apoteosis mundana. Pero en casa de los Kampf no todos comparten el mismo entusiasmo. Herida en su orgullo por la prohibición materna de asistir al ágape, Antoinette, de catorce años, observa con amargura los agitados preparativos del baile y siente que ha llegado la ocasión de enfrentarse a su madre, afirmarse a sí misma y realizar su propia entrada en la edad adulta. Con un breve gesto, tan impulsivo como espontáneo, provoca una situación absurda que culminará en un final dramático y revelador. Dotada de una afilada percepción psicológica, Némirovsky condensa en pocas páginas una historia donde la difícil relación madre-hija y el ansia de reconocimiento social se funden con la pasión por la vida y la búsqueda de la felicidad. Una obra indispensable de uno de los grandes escritores del siglo XX.
Irène Némirovsky nació en Kiev en 1903 en el seno de una familia acaudalada que huyó de la revolución bolchevique para establecerse en París en 1919. Hija única, Irène recibió una educación exquisita, aunque padeció una infancia infeliz y solitaria. Años antes de obtener la licenciatura en Letras por la Sorbona, su precoz carrera literaria se inicia en 1921 con la publicación del texto Nonoche chez l’extralucide en la revista bimensual Fantasio. Pero su salto a la fama se produce en 1929 con su segunda novela, David Golder, la primera que vio la luz en forma de libro. Fue el comienzo de una brillante trayectoria que consagraría a Némirovsky como una de las escritoras de mayor prestigio de Francia, elogiada por personajes de la talla de
Cocteau, Paul Morand, Robert Brasillach y Joseph Kessel. Sin embargo, la Segunda Guerra Mundial marcaría trágicamente su destino. Denegada en varias ocasiones por el régimen de Vichy su solicitud de nacionalidad francesa, Némirovsky fue deportada y asesinada en Auschwitz en 1942, igual que su marido, Michel Epstein. Sesenta años más tarde, el azar quiso que el nombre de Irène Némirovsky regresara al primer plano de la actualidad literaria con el enorme éxito de Suite francesa, su obra cumbre descubierta casualmente por sus hijas y publicada en 2004. Galardonada a título póstumo con el Premio Renaudot, entre otros muchos reconocimientos —entre ellos el Premio de los Libreros de Madrid del año 2006—, la novela ha sido traducida a treinta y nueve idiomas, relanzando el interés por una autora que se sitúa sin duda entre los grandes escritores franceses del siglo XX.
Mis impresiones
Son muchos los blogs que sigo y de cada uno podría decir algo que me llama la atención. En esta ocasión, la culpable de que yo haya elegido este libro ha sido Manuela de Entre mis libros y yo que suele reseñar pequeñas joyitas que cumplen aquello de que lo de lo bueno si breve dos veces bueno. A través de alguna reseña suya me interesé por Irene Némirovsky y, ya de antemano, sabía que me iba a gustar aunque no adivinaba cuánto. Desde aquí le doy las gracias porque, desde luego, por mis propios medio jamás hubiera cogido este libro. Yo soy muy de portadas que me llamen la atención y, la verdad es que como atractiva la de este libro y los de esta autora, para mi desde luego no tienen nada. He decidido estrenarme con Irene a través de este libro y os cuento mis impresiones.
El baile nos narra un breve episodio en la vida de una familia. Una historia que abarca un espacio temporal muy breve del año 1928 pero que llega a ser muy intenso por la profundidad de los personajes que nos muestra su autora. Los Kampf son una familia que, a través de un golpe de suerte, se encuentran dentro de lo más granado de la alta sociedad parisina. Son lo que podríamos denominar "nuevos ricos". No obstante, esta es una nueva situación para ellos y, pese a que su nivel económico es envidiable, no gozan del reconocimiento social que desean. En aras de solucionar esta situación deciden organizar un baile en su casa e invitar a la flor y nata de los parisinos. Unos doscientos invitados va a ser citados a la velada de los Kampf.
Son muchos los blogs que sigo y de cada uno podría decir algo que me llama la atención. En esta ocasión, la culpable de que yo haya elegido este libro ha sido Manuela de Entre mis libros y yo que suele reseñar pequeñas joyitas que cumplen aquello de que lo de lo bueno si breve dos veces bueno. A través de alguna reseña suya me interesé por Irene Némirovsky y, ya de antemano, sabía que me iba a gustar aunque no adivinaba cuánto. Desde aquí le doy las gracias porque, desde luego, por mis propios medio jamás hubiera cogido este libro. Yo soy muy de portadas que me llamen la atención y, la verdad es que como atractiva la de este libro y los de esta autora, para mi desde luego no tienen nada. He decidido estrenarme con Irene a través de este libro y os cuento mis impresiones.
El baile nos narra un breve episodio en la vida de una familia. Una historia que abarca un espacio temporal muy breve del año 1928 pero que llega a ser muy intenso por la profundidad de los personajes que nos muestra su autora. Los Kampf son una familia que, a través de un golpe de suerte, se encuentran dentro de lo más granado de la alta sociedad parisina. Son lo que podríamos denominar "nuevos ricos". No obstante, esta es una nueva situación para ellos y, pese a que su nivel económico es envidiable, no gozan del reconocimiento social que desean. En aras de solucionar esta situación deciden organizar un baile en su casa e invitar a la flor y nata de los parisinos. Unos doscientos invitados va a ser citados a la velada de los Kampf.
El punto fuerte de la novela son los personajes y fundamentalmente dos mujeres son las protagonistas: de un lado tenemos a la señora Kampf (Rosine), una madre desnaturalizada y egoísta, que odia a su propia hija, una mujer despreciable, arrogante, totalmente artificial, que vive absolutamente encorsetada y está dispuesta a hacer cualquier cosa para lograr el reconocimiento social, algo que para ella sería como alcanzar la mayor de las glorias.
Por otro lado nos encontramos con Antoinette, su única hija, una adolescente de catorce años que está despertando a la edad adulta, llena de sueños románticos y deseosa de conocer el amor y sentirse el centro del universo, una necesidad en gran parte provocada por la carencia afectiva que tiene de su propia familia. Es una niña muy observadora aunque retraída y detesta a su madre por el trato que le proporciona. Su cabeza no
Por otro lado nos encontramos con Antoinette, su única hija, una adolescente de catorce años que está despertando a la edad adulta, llena de sueños románticos y deseosa de conocer el amor y sentirse el centro del universo, una necesidad en gran parte provocada por la carencia afectiva que tiene de su propia familia. Es una niña muy observadora aunque retraída y detesta a su madre por el trato que le proporciona. Su cabeza no
para de trabajar imaginando algún plan que le permita vengarse de su madre por tanto desprecio acumulado y por no permitirle asistir al baile. ¿Conseguirá su propósito? En este personaje, parece ser que hay mucho de la propia Némirovsky que tuvo una infancia solitaria y desdichada.
Respecto al padre de Antoinette, el señor Kampf, se nos muestra como un personaje más sosegado. Tiene las mismas aspiraciones de su esposa, pero se nos dibuja como un auténtico pelele en las manos de su mujer sometiéndose a su voluntad para no contrariarla.
Respecto al padre de Antoinette, el señor Kampf, se nos muestra como un personaje más sosegado. Tiene las mismas aspiraciones de su esposa, pero se nos dibuja como un auténtico pelele en las manos de su mujer sometiéndose a su voluntad para no contrariarla.
Nos encontramos ante una historia que realiza una crítica de la alta sociedad llena de hipocresía y envidia donde las apariencias priman sobre todo lo demás y cada cual vive en una lucha constante por obtener un mayor status social.
En definitiva, El baile ha sido una historia de las que lees en un suspiro y con la que disfrutas muchísimo, una novela que tiene un estilo sencillo y cuidado, que esconde mucho detrás de sus escasas páginas y termina con un broche de oro. Me ha parecido una historia impresionante que no debería dejar escapar nadie que cuente con un rato libre.
En definitiva, El baile ha sido una historia de las que lees en un suspiro y con la que disfrutas muchísimo, una novela que tiene un estilo sencillo y cuidado, que esconde mucho detrás de sus escasas páginas y termina con un broche de oro. Me ha parecido una historia impresionante que no debería dejar escapar nadie que cuente con un rato libre.