El verano de los juguetes muertos - Toni Hill

El verano de los juguetes muertos

Autor: Toni Hill

Audiolibro de Audible

Precio: Gratis con el alta

Duración: 9 horas y 54 minutos

Sinopsis

Tres muertes inexplicables.

Dos promesas de venganza.

Un verano sofocante.

El inspector Héctor Salgado lleva semanas apartado del servicio cuando le asignan de manera extraoficial un caso delicado. La extraña muerte de un joven de la alta burguesía barcelonesa va complicándose a medida que Salgado se adentra en un mundo de privilegios y abusos de poder. Héctor no solamente deberá enfrentarse a ello sino también a su pasado más turbio, que en el peor momento y de modo inesperado vuelve para ajustar cuentas.

Los sueños, el trabajo, la familia, la justicia o los ideales tienen un precio muy alto... pero siempre hay gente dispuesta a pagarlo.

Toni Hill (Barcelona, 1966) es licenciado en psicología. Lleva más de diez años dedicado a la traducción literaria y a la colaboración editorial en distintos ámbitos. Entre los autores traducidos por él se encuentran David Sedaris, Jonathan Safran Foer, Glenway Wescott, Rosie Alison, Peter May, Rabih Alameddine y A.L. Kennedy. Su trilogía del inspector Héctor Salgado se ha publicado en más de veinte países y ha sido un éxito de venta y crítica: El verano de los juguetes muertos (2011),Los buenos suicidas (2012) y Los amantes de Hiroshima (2014). En su última novela, Los ángeles de hielo (Grijalbo, 2016), nos ofrece una magistral historia de intriga psicológica que penetra en los rincones más oscuros de la mente humana, a la vez que nos refleja el ambiente de unos años marcados por la guerra y la tensión social.

Mis impresiones 

La reseña que os presento hoy es la primera que corresponde a un audiolibro, un sistema que me ha convencido totalmente y del que publicaré una entrada para animar a todos aquellos que dispongan de menos tiempo o a los que su vista no le permita demasiada lectura. Como todas las cosas, tiene sus cosas buenas y sus cosas malas, sobre todo, temo cometer algún error en los apellidos o nombres de los personajes, que son catalanes. Si es así, espero sepáis disculpadme. Con esta reseña me estreno además con Toni Hill, un autor del que tenía buenas referencias y su última novela en papel esperando en la estantería. El azar ha colado ésta primero.

El verano de los juguetes muertos es una novela negra que se inicia presentándonos al inspector Héctor Salgado cuando regresa de su Argentina natal a Barcelona, ciudad donde reside desde hace más de veinte años. Mientras investigaba una red de prostitución de mujeres nigerianas, perdió el control y atacó brutalmente a uno de los implicados en la misma. Su superior, el comisario Savall, le retiró temporalmente del caso y, después de un mes, espera poder reincorporarse a su puesto de trabajo. 

En comisaría hay novedades, Héctor está acostumbrado a trabajar codo a codo con la inspectora Andreu, con la que tiene una estupenda relación, pero tienen una nueva incorporación, Leire Castro, una joven sobradamente preparada que desde el principio da indicios de tener una agudeza fuera de lo común en relación a su escasa experiencia. 

Con objeto de alejar a Héctor del caso de las nigerianas y mientras sale la resolución oficial que permita su reincorporación, Savall le asigna una investigación aparentemente de poca importancia. En la noche de San Juan, un joven de diecinueve años, hijo de un influyente empresario barcelonés se arrojó al vacío desde la ventana de su apartamento tras haber estado de celebración con dos amigos: Aleix y Gina. Sin embargo, a medida que el inspector y su ayudante, la joven Leire van tomando contacto con el entorno de la víctima, una oscura sombra planea sobre lo ocurrido; todos parecen ocultar algo, no hay respuestas claras, concisas y hay nervios de por medio en cada interrogatorio.

Toni Hill construye una historia, narrada en tercera persona a cargo de un narrador omnisciente, en la que la trama inicial de prostitución cede el protagonismo a la investigación de la muerte de Marc Castell aunque ambas irán alternándose para quedar completamente resueltas. 

Nos encontramos ante una novela muy ágil, que transcurre en apenas una semana, que va de menos a más, plagada de diálogos y giros insospechados, que la amenizan y en la que la tensión va creciendo a medida que. Rencores, infidelidades, secretos, envidias, ansias de poder y rencillas de antaño irán desfilando ante nuestros ojos a través de una galería de personajes extensa que llegaremos a conocer con bastante profundidad; en el caso de los investigadores, no sólo nos muestra el autor su faceta profesional sino que les conoceremos en un ámbito personal. Aunque son muchísimos los personajes que transitan por sus páginas, son dignos de mención: 

De los investigadores: Héctor Salgado, un inspector de los Mossos d’escuadra, que, además del momento delicado que atraviesa en su trabajo, en lo personal trata de recuperarse de la separación de su esposa. Es un hombre bien valorado en comisaría, buen compañero, muy analítico, de buen hacer y nadie se explica cómo pudo perder los estribos de tal forma. Le acompañará en la investigación la jovencísima Leire Castro, una mujer que tiene una capacidad mucho mayor de la que a primera vista puedan esperar de ella, pero también tiene problemas personales que resolver. Andreu, es una compañera de Salgado desde antiguo. Aunque es muy rigurosa en su trabajo, está dispuesta a ayudar a su compañero en lo que necesite. 

Del entorno de la víctima: Alex y Gina, los dos jóvenes compañeros de clase de Marc y con los que mantenía una extraña relación, el propio Marc cuyo retrato se irá construyendo a partir de la investigación y los familiares del fallecido, el prepotente Enric Castell, su padre, su exmujer y el tío de la víctima.

La ciudad de Barcelona aparece dibujada en multitud de pasajes de la novela, sus calles, sus paseos sus avenidas, el puerto, los barrios de clase alta, otros más humildes y sobre todos la humedad que invade la ciudad en verano y convierte ese calor en algo insoportable. 

Estructuralmente la novela se compone de un prólogo encabezado como ayer, cuarenta y dos capítulos, en general de corta duración entre 5 y veinte minutos, salvo alguno un poco más extenso y un epílogo titulado hoy totalmente ineperado. En este sentido, tengo mis dudas de si la grabación del audio será fiel a los capítulos que componen la novela en papel. 

En definitiva, El verano de los juguetes roto es una novela muy ágil, llena de secretos e intrigas, que se irán despejando para dar paso a nuevas incógnitas y con unos personajes muy bien matizados donde la ciudad de Barcelona se alza como una protagonista de excepción de la trama.