Lo bueno de los blogs son esas pequeñas joyas que nos acercan. Me encantan los libros cortos que dejan huella. Hablando de huellas, esta semana estrenamos como bloguera a María Inés Caro con La huella de los libros. Si no la conocéis, no dejéis de visitarla.
Desde que Albanta de Adivina quién lee reseñó esta historia la quise leer. Las buenas opiniones estaban inundando los blogs y las redes y, por fin, hoy os traigo mis impresiones de la historia.
Título: Y tú no regresasteAutor: Marceline Loridan-Ivens
Editorial: Salamandra
Páginas: 96
Precio: 14,50 euros
Hay libros que dejan una marca indeleble y, mucho tiempo después de haberlos leído, permanecen vivos en nuestro recuerdo. Éste es uno de ellos. A los ochenta y seis años, Marceline Loridan-Ivens ha volcado en esta carta abierta a su padre un cúmulo de sentimientos profundamente arraigados desde su juventud, de los que ha sido incapaz de desprenderse durante toda una vida.
«Tú podrás regresar, porque eres joven, pero yo ya no volveré.» Esta simple frase, que Marceline oyó de boca de su padre cuando eran deportados en el mismo tren al campo de Auschwitz-Birkenau en abril de 1943, quedó grabada en su memoria para siempre y es el origen de este relato extraordinario.
La dramática lucha de una chica de quince años por sobrevivir en una situación que ha pasado a la historia como paradigma de la máxima depravación de la que es capaz el hombre queda plasmada con una voz asombrosamente desprovista de sentimentalismo y autocompasión. En su lucha imposible contra una fuerza aplastante, Marceline narra los hechos cotidianos con la frialdad y la distancia de quien, incluso después de setenta años, no puede permitirse ni siquiera el sufrimiento; de alguien que invirtió hasta la última fibra de su persona en un solo fin: salir con vida del infierno y honrar así las palabras de su padre.
Pero más allá del conmovedor homenaje de una hija a la única persona en el mundo a la que pudo amar de verdad, estas páginas exhalan un reconfortante soplo de energía y vitalidad, una demostración palpable de la insondable capacidad del ser humano para sobreponerse a los desafíos más extremos que su propia especie le presenta.
Marceline Loridan-Ivens nació en Épinal en 1928 y, siendo sólo una adolescente, se unió a la resistencia. A los quince años fue detenida junto con su padre y enviada al campo de Auschwitz-Birkenau y, más tarde, a los de Bergen-Belsen y Theresienstadt. Superviviente del Holocausto, Marceline ha gozado de una prestigiosa carrera como realizadora de películas y documentales, tanto en solitario como junto a su marido, Joris Ivens, y entre sus obras destaca La petite prairie aux bouleaux (2013), un film inspirado en su experiencia en los campos de concentración. En 2008, Marceline escribió su autobiografía, Ma viebalagan, en colaboración con la periodista Elisabeth D. Inandiak, y en 2015 ha publicado Y tú no regresaste, una obra que se ha traducido a quince idiomas y ha recibido el premio de la Académie Lilas y el Jean-Jacques Rousseau.
Mis impresiones
Marceline Loridan-Ivens, nacida en Épinal (Francia) e hija de un judío polaco nos trae un relato desgarrador sobre la ausencia de su padre. Han pasado setenta años del horror vivido en aquel campo de concentración del que Shloïme jamás volvió, pero Marceline no puede dejar de preguntarse qué fue de él.
Cuando tenía quince años, fue detenida junto a su padre y enviada a Polonia. Su padre quedó en el campo de Auschwitz, ella en Birkenau. Ella lo relata así:
Los historiadores los han unido con un simple guión: Auschwitz-Birkenau. Algunos se limitan a decir Auschwitz, el maryor campo de exterminio del Tercer Reich. El tiempo borra lo que nos separaba, lo deforma todo. Auschwitz estaba pegado a una pequeña ciudad, Birkeanu estaba en la campiña…Y yo miraba ahacia ti y me preguntaba: “¿Eso es el campo o es la ciudad? ¿Lo han gaseado? ¿Todavía está vivo? Entre nosotros había terrenos, barracones, torretas de vigilancia, alambradas, crematorios y, por encima de todo ello, la insoportable incertidumbre sobre lo que le ocurría al otro. Parecían miles de kilómetros. Apenas eran tres, cuentan los libros.
Allí, despojada de todo, no dejó de luchar nunca por lograr salir de aquel infierno. Aún hoy, no puede dejar de recordar las palabras que su padre le dijo de camino a Auschwitz: “Tú si volverás porque eres joven, pero yo no regresaré”, una frase que para ella se ha convertido en una condena.
Él era su protector, su héroe, el que la quería con locura y ella era su niña. Su adolescencia quedó atrás y con ella, sus vivencias en el campo. A su regreso, no podía dejarse abatir, tenía que salir adelante y vivir su vida, aunque solo fuera para honrar a todos aquellos que no tuvieron esa oportunidad. Y lo hizo, porque si de algo no queda
ninguna duda es de la fortaleza de nuestra protagonista.
Y tú no regresaste nos relata, en tan sólo noventa y dos páginas, la carta que Marceline escribe a su padre y donde nos cuenta cómo fue su vida desde que fueron detenidos hasta la actualidad.
Va a ser ella misma, la que nos narre en primera persona la historia sobre su paso por el campo de los horrores. Es asombroso, la manera en la que ella se aleja de los hechos y nos cuenta su historia sin autocompadecerse, acercándonos al día a día de aquellos campos pero dejándonos absolutamente desolados con su testimonio.
Resulta complicado recomponer los trocitos de una vida de alguien que ha pasado por un campo y ha tenido que convivir, día a día, con el olor de los hornos crematorios, realizar clasificación de ropa de aquellos que fueron gaseados o trabajar cavando zanjas para los cadáveres. La vida deja de tener sentido y, a su regreso, todos querían que sus vidas volvieran a la normalidad pero, ¿era eso posible?
No sabes hasta qué punto fue intensa, incluso violenta, aquella locura de los judíos por reconstruirse a cualquier precio tras la guerra. Querían que la vida retomara su curso, sus ciclos, y que lo hiciera deprisa. Querían matrimonios, aunque hubiera ausencias en la foto, bodas, parejas, cantos y enseguida niños con que llenar el vacío.
En resumen, Y tú no regresaste es una novela dura, breve pero intensa que te cala hondo y te remueve por dentro. Una historia que no puedo dejar de recomendaros porque aborda la historia de una familia judía desde un punto de vista muy diferente a todo lo que hayáis podido leer hasta ahora.
Me alegro que la hayas leído por mi recomendacion pero sobre todo que la lectura haya cumplido tus expectativas.
ResponderEliminarEsta temática siempre me ha interesado mucho.Lo que más me atrae es lo del tema judío desde otro punto de vista. Tendré muy en cuenta esta novela.
ResponderEliminarY muchss gracias guapa!
Un beso
Pues habrá que tenerla en cuenta. Gracias, guapa.
ResponderEliminarBesos
Tengo un problema con libro que tienen esta tematica. Cada vez que lo leo me enfado porque no entra en mi cabeza como un ser humano puedo hacer lo que hizo a un pueblo entero. Este tipo de libros es un buen recordatorio de nuestra historia y que no se nos tiene que olvidar. Besos
ResponderEliminarNo paro de ver este libro por todos lados, será una señal?
ResponderEliminarSe que me.gustaria así que a ver si me hago con el.
Besos
Uy, Ángeles. Me pones los dientes largos con esta novela que nos traes hoy. Tomo buena nota de ella. Besos.
ResponderEliminarCada vez me atrae más este libro. A ver si cae en mis manos pronto.Un besote
ResponderEliminarA esta le tengo ganas, pinta muy bien :)
ResponderEliminarLo tengo anotado desde que lo reseñó Liboseris... me apetece muchísimo!
ResponderEliminarUn beso
A mí ya me tenéis convencida con esta, pero necesito el momento adecuado porque esta temática siempre me afecta más de la cuenta.
ResponderEliminarBesos.
Todo lo relacionado con el Holocausto me hace sufrir, y hace tiempo que deje de leer sobre esta tematica, pero lo que cuentas es para no dejarla pasar. La tendré muy en cuenta. Besos
ResponderEliminarEs dura como bien dices pero a mi también me gustó mucho.
ResponderEliminarUn saludo! :)
Es de las mía, novela intensa. Por Dios, los pelos de la autora me han despistado...jajajaja esta no conoce un peine, que no nos oiga.
ResponderEliminarBesos, amore.
Un historia dura pero cortita. La tendré en cuenta.
ResponderEliminarUn beso ;)
Solo leo cosas buenas de este libro, lo tendré en cuenta.
ResponderEliminarUn beso!
La tengo en mi lista desde hace tiempo...
ResponderEliminarMe apetece mogllón. Me lo han recomendado, a pesar de que es dura, me dicen que emotiva. Veo que compartes las mismas opiniones.
ResponderEliminarBesitosss
Me gusta mucho lo que cuentas, la tendré en cuenta :)
ResponderEliminarBesos!
No miro, no miro, no miro... A ver si me da lugar a leerlo en el fin de semana. Besos.
ResponderEliminarA mi las historias duras me cuestan, y este en principio lo iba a dejar pasar, pero me has convencido: a la lista que se viene
ResponderEliminarBesos!
Lo había visto pero no había profundizado en él, pero después de tu reseña creo que a ser posible lo leeré, es un tema que me gusta. Besos
ResponderEliminarHola guapa!
ResponderEliminarPinta genial, aunque por el momento lo dejo pasar. Genial reseña. Besotes
Hola! Tiene muy buena pinta, así que me lo anoto, a ver si consigo hacerme con él y encuentro un hueco para leerlo, jejeje.
ResponderEliminarBesos!
Un relato precioso la verdad...me ponía los pelos de punta cada poco y el final...ufff
ResponderEliminarUn beso!
No soy muy de historias cortas, por lo que lo dejo pasar, besitos;)
ResponderEliminarPues esta pequeña joya la quiero, la necesito conmigo ya !
ResponderEliminarBesos.
Me encantó todo, la forma de escribir, la historia... fue genial. Saludos :D
ResponderEliminarLa has vendido tan bien que solo puedo decirte: Gracias, ya te conatré¡¡
ResponderEliminarUn besazo enorme¡¡¡
¡Hola!
ResponderEliminarA pesar de tu preciosa reseña, la voy a dejar pasar.
Un beso.
Criss.
Sabes que la leí y que no me canso de recomendarla. Dura pero de esas que hay que leer sí o sí. Un relato increíble. Un besazo!
ResponderEliminarCuándo has dicho que me regalas el libro para leerlo?
ResponderEliminarAhora en serio, me lo anotó. Y con mayúsculas.
Cada vez me apetece más leer este libro, estoy segura de que me va a gustar
ResponderEliminarBesos
Hay libros pequeños muy grandes. Gracias por ponerle un foco, a veces no se ven.
ResponderEliminarBesos
Hay libros pequeños muy grandes. Gracias por ponerle un foco, a veces no se ven.
ResponderEliminarBesos
Me la llevo!! ¡Qué buena pinta!
ResponderEliminarBesos
Oootra que tengo apuntada jijijij Jolines, no me da la vida para todo lo que quisiera leer...
ResponderEliminarGracias por tu reseña. Besos
Apuntado.Lo bueno en tarro pequeño no?.
ResponderEliminarMe encantan este tipo de historias!! Me la apunto desde ya.
ResponderEliminarSi alguien quiere leer reseñas de libros, películas o historias en general, no dudéis en pasar por mi blog, me encantan las visitas.
Www.savingmemories-blog.blogspot.com